Lugar: Parrilla “Los
Corzos” (La Manjoya - Oviedo).
Comentario:
En este día iba a ir a comer
a la Parrilla “Los Corzos” con algunas compañeras del curro, así que este post
sirve un poco de reflejo para la comida de este día…
Foto recuerdo de los 4
(Inés, Begoña, Mari Luz y este menda).
La comida…
Luego nos iríamos hasta
el Palacio de la Zureda a tomar algo.
En resumen, muy buena
jornada a todos los niveles.
Noticia del
fallecimiento de un actor al que vi de guaje en muchas películas que me
hicieron disfrutar, Bud Spender que junto “su alma gemela” cinematográfica Terence Hill, formaron una de las parejas más
conocidas dentro del mundo del cine.
Sirva de pequeño
homenaje y recuerdo para dicho actor, este post...
En Buenos Aires (Argentina) fue
bibliotecario; en Montevideo (Uruguay) ejerció como bibliotecario durante
años, y trabajó en el consulado italiano local.
Esta experiencia le permitió
"reencontrarse a sí mismo en los límites y en las potencialidades".
Posteriormente pasó a formar parte de una concesionaria de autos de Caracas hasta
1960.
En 1960 se casó con
Maria Amato, con la que tuvo tres hijos: Giuseppe (1961), Christine (1962) y
Diamante (1972). Hablaba seis idiomas.
A los 20 años, en
1949, comenzó a nadar para el club SS Lazio, y se proclamó campeón de Italia
de los 100 metros libres, título que conquistaría en siete ocasiones
consecutivas.
Fue
el primer nadador italiano que rebajó el muro del minuto en los 100 metros
libres (19 de septiembre de 1950 en Salsomaggiore –con una marca de 59”5).
Fue
semifinalista olímpico en Helsinki 1952 y en Melbourne 1956, e integrante del “Settebello” de los años 50 en waterpolo.
Durante su
estancia en Venezuela participó con el equipo nacional en el III
Campeonato Grancolombiano de natación, celebrado en Caracas,
en 1959.
Carrera cinematográfica
Su primera aparición
en el cine fue en Quo Vadis? (1950), haciendo de
guardia del Imperio romano.
Cambió su nombre por el de Bud
Spencer en 1967 porque le gustaba Spencer Tracy y
la cerveza Budweiser.
Con ese nombre protagonizó su primer filme con el
también actor italiano Terence Hill, en la película Dios perdona... yo no (1967), de la
que ambos protagonizaron dos secuelas.
La pareja protagonista de spaghetti
westerns alcanzó su primer gran éxito con Le llamaban Trinidad (1971), que,
aunque ambientada en el salvaje Oeste,
ya ejemplificaba los derroteros artísticos por los que luego discurriría su
carrera: cine de humor con catárticos finales a base de mamporrazos, y con una
dualidad en los personajes basada en la fuerza expeditiva y acción directa de
Bud frente al audaz y manipulador Terence.
Carlo Pedersoli
también fue autor de las canciones de algunas de las películas donde participó
como actor.
Su pasión por la
aeronáutica le llevó a obtener la licencia de piloto privado, tanto de avioneta
como de helicóptero. En 1981 fundó la línea aérea de carga Mistral Air,
que pertenece ahora al correo italiano.
En 2009 hizo un
anuncio de televisión para Bancaja, que se acompañó con la canción Born to be
alive. El estilo del mismo recuerda las películas grabadas en la década de los
setenta junto con Terence Hill, como fue el caso de Dos super-policías.
El mítico actor italiano Bud Spencer ha muerto a los 86 años de
edad en un hospital de Roma, según medios italianos. "Mi padre ha muerto
pacíficamente. No padeció, estábamos todos con él y su última palabra fue
'gracias", ha expresado su hijo Giuseppe.
Nacido en Nápoles el 31 de octubre de 1929 con el nombre de
Carlo Pedersoli, el actor tuvo una vida donde triunfó en el deporte como
nadador y en la pantalla con susépicos
puñetazos al lado de su inseparable compañero Terence Hill.
Jugador de waterpolo en su juventud,fue el primer italiano que bajó
del minuto en los 100 metros libres, participando además en los
Juegos Olímpicos de Helsinki 1952, Melbourne 1956 y Roma 1960. Pasó parte de su
adolescencia en Río de Janeiro y tras esta paréntesis marchó a Roma, donde
retomó los estudios y su amor por la natación.
"Mi gran éxito es mérito del
público que ha mostrado su simpatía por este hombre de 120-150 kilos,
pero el deporte me ha enseñado los grandes valores de la vida", contaba
Bud.
Su físico imponente llamó a las puertas de la interpretación en
algunas películas comoQuo
Vadis?(1951). Aunque
su primer papel importante fue el del agresivo Nando de la película de Mario
MonicelliUn eroe dei nostri tempi(1955).
En 1957 dejó Italia y volvió a Sudamérica, donde trabajó como
obrero de la construcción por un tiempo antes de volver para probar fortuna con
la música, siendo autor de canciones para cantantes del momento como Ornella
Vanoni y Nico Fidenco. No obstante, las cámaras no había acabado con sus puños.
Su regreso a la pantalla grande fue con el título de Giuseppe ColizziDio perdona... ma io no(1967), que marcó el tipo de personaje
que después interpretaría Spencer, el delgigante
bueno, al que es mejor que no hacerle enfadar.
Su encuentro con Terence Hill fue el que le catapultó a la fama
dando lugar a un auténtico genero cinematográfico con películas comoI quattro dell'Ave Maria(1968),La collina degli stivali(La colina de las botas,
1969) oLo chiamavano Trinità...(Le llamaban Trinidad,
1970), entre otras. Otras películas míticas, no ambientadas en el lejano oeste,
fueronChi trova un amico, trova un
tesoro(Quién
tiene un amigo, tiene un tesoro, 1981);Miami Supercops(Dos
superpolicías en Miami, 1985);Altrimenti
ci arrabbiamo(Y
si no, nos enfadamos, 1974) yBotte
di Natale(Y
en Nochebuena, se armó el Belén).
Por su cuenta, otras películas destacadas sonBanana Joe(1981) yLo chiamavano Bulldozer(Le llamaban Pegafuerte,
1978).
Carlo Pedersoli también quiso dar el salto a la política yse presentó en 2005 a las
elecciones regionales del Lazio, cuya capital es Roma, en las
listas de Forza Italia, el partido de Silvio Berlusconi, pero no fue elegido.
Reino
Unidoha emprendido este viernes el camino,
lleno de incógnitas colosales, hacia su nuevo lugar en el mundo. La histórica
decisión que tomaron el jueves en las urnas los británicos sacudirá a Europa
entera y dará aliento a los movimientos que desafían la política tradicional en
todo el mundo occidental. La sucesión de acontecimientos desatados en las horas
siguientes a conocerse la ajustada victoria delBrexit, da idea de la magnitud de las
consecuencias que se avecinan. Cameron anunció que dimitirá en octubre. La ministra principal escocesa dijo que un nuevo referéndum de independencia en
Escocia es “altamente probable”. Diputados laboristas iniciaron los trámites
para una moción de censuracontra Jeremy Corbyn. De poco sirvieron las llamadas a la conciliación de los victoriososBoris
Johnsony Michael Gove. La jornada dejó a la libra bajo mínimosy las bolsas en rojo. Los líderes europeos pidieron un
proceso de ruptura rápida para superar el mayor revés en la historia del proyecto.
La primera incógnita, la principal, se despejó con la
comunicación del resultado oficial a primera hora de la mañana. Los británicos,
por un 51,9% contra un 48,1% de los votos, habían decidido abandonar la Unión Europea.
La segunda no tardó ni dos horas en resolverse. Ante el 10 de Downing
Street, la que ha sido su residencia en los últimos seis años, David Cameron
anunció que se va en octubre. El país, dijo un primer ministro que hace un año
parecía intocable, “necesita un liderazgo fuerte” que él no está en condiciones
de proporcionar. Su legado será exactamente el contrario del que soñó. Quien
quiso pasar a la historia como el primer ministro que zanjó el debate europeo y
que hizo resurgir la economía británica, se va tras sacar al país de Europa y
depositar una bomba en la economía mundial.
A
partir de ahí, todo aconteció en cadena. Nicola Sturgeon, ministra principal
escocesa, se encargó de recordar al país que el desafío al que se enfrenta es
de carácter doble: no solo habrá de encontrar un nuevo lugar en el mundo, sino
abordar su delicada realidad territorial. “Un nuevo referéndum de independencia
en Escocia es altamente probable”, dijo Sturgeon, quien consideró
“democráticamente inaceptable” que los escoceses seanarrastrados
fuera de la UE contra si voluntad mayoritaria.
Los efectos
colaterales delBrexitalcanzaron
también a la oposición laborista. Su fracaso en movilizar a su electorado
tradicional fue una de las claves del desenlace. El laborismo no tuvo
argumentos para responder al miedo a la inmigración entre las clases
trabajadoras, que el referéndum ha revelado como uno de los conflictos sociales
más importantes del país. En respuesta al tibio compromiso que exhibió en la
campaña Jeremy Corbyn,dos diputadas promovieron
por la tarde una moción de censuraque
supone la primera cristalización del desafío a su liderazgo amagado por sus
enemigos desde que tomó las riendas del partido en septiembre.
Europa, por su parte,recibe un revés seco y
directo.Al mentón,
donde más duele. ElBrexitla
condena a una etapa de convulsiones económicas, financieras, políticas e
incluso legales cuando el club está aún lejos de reponerse de la Gran Recesión. La UE descubre, de pronto, que ya
no es irreversible. El desplome de la libra esterlina fue apenas un aperitivo:
las turbulencias en los mercados recordaron los tiempos de Lehman Brothers.
ElBrexitabre una nueva era: es, de largo, el
mayor revés del proyecto desde su fundación hace seis décadas. “Reino Unido ha
elegido el camino de la inestabilidad; el resto de socios europeos no debería
seguir esa senda”, acertó a decir el jefe del Eurogrupo, el holandés Jeroen
Dijsselbloem. Las principales instituciones –Comisión, Consejo Europeo y
Eurocámara—emitieron un comunicado conjunto en el que abren la puerta de salida
a Londres y subrayan la unidad del resto de socios.
Bruselas miraba de
reojo a Berlín y París. De ambas capitales llegó la misma sensación de
incertidumbre: “El resultado del referéndum será un parteaguas para el proyecto
europeo”, dijo la canciller Angela Merkel. “Se trata de unshockexplosivo: es
hora de reinventar otra Europa”, apuntó el primer ministro francés, Manuel
Valls. Juncker pidió a Berlín y París “celeridad” para dejar claro cuanto antes
cómo va a funcionar desde ahora la
Unión de los Veintisiete.
El equilibrio no será
fácil: ni Alemania ni Francia quieren concesiones para Reino Unido que
estimulen el euroescepticismo a escasos meses de sus elecciones. Hollande y
Merkel se reúnen el próximo lunes con el italiano Matteo Renzi y el presidente
del Consejo, Donald Tusk, para fijar una posición común de cara a la cumbre de
la semana próxima.
¿Es el principio del
fin del proyecto europeo?, se preguntaba la prensa británica en la sede de la Comisión Europea.
“No”, contestó rotundo el jefe del Ejecutivo europeo, Jean-Claude Juncker, que
reclamó a Londres “que no prolongue innecesariamente la incertidumbre” y
empiece a negociar de inmediato su salida, a la vista de que el Ejecutivo
británico ha empezado a jugar con los tiempos como estrategia para lograr un acuerdo
más beneficioso.
Ni siquiera con la
miel de la victoria en la boca renunció Boris Johnson a llevar la contraria a
sus odiados “burócratas europeos”. El exalcalde de Londres y estrella principal
de la campaña por el Brexit dijo que no había prisa por invocar el artículo 50,
que abre el proceso de dos años para negociar los términos del divorcio. Con
actitud grave de hombre de Estado, preparando acaso el camino hacia Downing
Street que se le se presenta ahora más despejado, Johnson llamó a la calma y a la
conciliación. La policía hubo de protegerle de una multitud que se congregó
junto a su casa para insultarlo.
La euforia la aportó
Nigel Farage. El líder del antieuropeo UKIP, cuya amenaza al partidotoryllevó a David Cameron a convocar el
referéndum, quiso recordar que si no fuera por él todo esto nunca se habría
producido. “Atrevámonos a soñar que amanece en un Reino Unido independiente”,
dijo, a primera hora de la mañana, como si llevara toda la vida saboreando la
frase.
La celebración de
Farage, apartado de la campaña oficial por su potencial divisorio, era la
prueba de que el del jueves fue también un voto contra las élites. La Inglaterra media
despreció en las urnas las reiteradas advertencias delestablishmentpolítico y económico sobre los riesgos
delBrexit. El mensaje
será convenientemente asimilado
por los movimientos populistas y nacionalistasque alimentan el antieuropeísmo en
todo el continente.
El voto a favor de permanecer en la Unión Europea no
solo venía de Escocia, Irlanda del Norte y Londres. También de los jóvenes: era
mayoritario entre los menores de 50 años, especialmente entre los que no han
cumplido aún los 25. En cambio, los mayores han apostado mayoritariamente por
dejar la Unión.
Como se puede ver en este gráfico (que se ha
compartido miles de veces en Twitter), los más jóvenes son los que más tiempo
tendrán que vivir con una decisión con la que mayoritariamente no están de
acuerdo. Según una encuesta reciente de la empresa de investigación de mercadoYouGov, el 64% de
los británicos de entre 18 y 24 años preferirían quedarse en la UE. Teniendo en
cuenta la esperanza de vida y que este no parece un proceso fácilmente
reversible, pasarán el resto de su vida, casi 70 años, fuera de ella.
Al día siguiente de mi
cumpleaños me iba aparecer Mari Luz con una flor como regalo para que me haga
compañía de cara al futuro, así que este post es para inmortalizar dicho
acontecimiento.