Día: 08-04-2022.
Lugar: La Noceda
(Oviedo).
Asistentes: Mª José,
Oscar, Inma, Carlos, Alberto (HUCA), José, Feli, Maite, Isabel, José Manuel.
Comentario:
Post en el que muestro
la cena que tuvimos algunos de los integrantes del grupo que hemos formado
recientemente para salir algunos días de ruta así que tras concertar fecha
entre todos, quedaríamos en este Viernes para cenar algo en la Sidrería “La
Noceda” ubicada al lado mismo de la C/Gascona así que estas son algunas
imágenes de la jornada de este día que como siempre resultaría disfrutona para
todos.
Como suele ser
habitual, quedaríamos un poco antes algunos así que la primera parada sería con
Mª José y Oscar en un pub conocido como “Mala Saña”.
Tras tomar un par de
vinos, nos acercaríamos al “Jamón, jamón” en donde ya nos estaban esperando
Isabel y Alberto, el cual no podría asistir en esta noche a la cena por motivos
laborales por lo que queda pendiente algún día de coincidir con él en horario
nocturno.
Al poco tiempo nos iba
a llegar otro asistente a la cena de este día, Alberto, compañero de Oscar y de
algunas compañeras del hospital, Alberto.
Tras esta segunda parada ya nos encaminaríamos todos al lugar de celebración del evento de este día, la Sidrería “La Noceda” en donde había reservado mesa para todos.
Una vez reunidos todos
en la mesa, algunos pediríamos en plan para la cena, un menú que tenían para la
noche por un poco menos de 30 euros y algunos otros se decantarían por ir de
algunos platos de la carta ya que les parecía excesiva la cantidad de comida
que ponían en dicho menú y ante la advertencia por parte del camarero, hay que
decir, que los del arroz del menú íbamos a tener que esperar cerca de media
hora para que cocinaran dicho plato.
Algunos de los
asistentes ojeando la carta a la hora de escoger los platos para picar.
No esperarían mucho los
de “los platos a compartir” para empezar a degustar los manjares que habían
pedido. Mientras tanto a “los del menú” nos empezaría a pasar el tiempo
mientras veíamos como empezaban los primeros a disfrutar de la comida que en
una primera tanda plasmada en imágenes se puede decir que sería...
Mientras tanto el
tiempo pasaba y como he comentado anteriormente, algunos seguíamos disfrutando “en
modo pasivo” de cómo los “del modo activo” seguían cenando así que a nivel
particular, como este menda en el tema hostelería ya no se calla nada, llamé la
atención del camarero y de forma educada mostré el malestar que teníamos algunos de los comensales, en este caso "los magníficos del menú" porque no se hubiera servido al mismo tiempo la comida ya que por ejplo, uno de
los platos de los otros comensales estaba compuesto por una tabla de embutidos
y queso, plato que no hace casi ni falta prepararlo ni servirlo a una
temperatura concreta.
El camarero asentiría
ante mi pequeña observación y enseguida nos traería para que abriéramos el
apetito “los magníficos del menú”, media de pastel de cabracho que empezamos a degustar “casi
todos” de uno de los extremos de la mesa.
El cabracho en cuestión
y que no nos cobrarían por supuesto.
Como bien he dicho “casi
todos de los del menú” seríamos los del cabracho ya que había uno de los “cuatro magníficos” que no toleraba por ciertas cuestiones dicho plato así que vuelta por mi parte a pegar "otro toque" al camarero y pedirle si era posible que nos trajeran una tapa
de algo de embutido para no marginar “en el tema inicial comedero” al cuarto “de
los magníficos” de este día.
No hay imagen de dicho
plato, pero al final nos traerían un plato de lomo, que este sí que nos lo
cobrarían así que por mi parte nada que objetar en este sentido.
¡Por fín! Llegaba el
primer plato del menú, arroz con bogavante que hay que reconocer que estaba
bastante bien, aunque como siempre que traen raciones conjuntas, siempre viene
menos cantidad de la que nos hubieran puesto en caso de venir por ejplo dos
este día y en este sentido sé de lo que hablo ya que el sábado había estado en
el mismo local con un colega para cenar el mismo tipo de menú.
Como siempre cuando
estamos todos, el buen ambiente reinaba de nuevo en la reunión así que “cada
mitad” de la mesa por su parte iríamos ingiriendo y disfrutando los diferentes
platos por el orden acordado con el camarero y sirva de muestra el siguiente
par de imágenes para dar a entender el sentido de lo que comento.
Mientras tanto, los
segundos platos “de los magníficos” llegaban a la mesa, en este caso entrecot
que también estaba bastante rico.
Antes de empezar con los
segundos en mi parte de la mesa, para algunos había tiempo para beber de nuevo
e incluso reflexionar.
Tras finalizar con la
segunda tanda, llegaban para algunos los postres y de los cuales sacaría
algunas imágenes aunque no están todos reflejados.
Y para finalizar la
velada, tocaba inmortalizar a los asistentes desde los dos extremos de la mesa
y “a vista de pájaro” (en la dos últimas me falta poco para arrastrarme por la
mesa en “modo exorcista”).
Tras estas últimas
imágenes y tras efectuar el pago correspondiente, abandonaríamos el local para
dar por finalizado el evento gastronómico-social de este viernes y con ganas de
repetir en un futuro próximo.
¡Repetiremos
seguro...!.
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